diciembre 5, 2017
In
CARTAS
Querida mamá….mañana de matanza
Querida mamá: No creias que al final ibas a conseguir que escribiera cartas. Se que te hace ilusión porque siempre te he oído decir que te daba mucha pena esta era informática que estaba acabando con el romanticismo del papel. Como ves y a pesar de que me riñas por estar con los auriculares puestos, todavía te escucho y como sueles decirme _"no hago más que repetir las cosas, al final algo te quedará"_, te voy a demostrar que mucho más que algo. Aquí empieza a hacer frio, las temperaturas están incluso bajo cero a primera hora del día. Aunque este año, la gente se queja de que el invierno estaba tardando en llegar. Estos días está todo el mundo contento por que el frío por fin ha llegado a tiempo para las matanzas. No te asustes mamá, que ya imagino esos ojos abiertos como platos Parece que para esto, el frio es el mejor amigo y este año ha sido de encargo...¡Tremendas heladas!. Pero menudas estampas han dejado, el rojo intenso del acebo coronado de cristales, y los frutos de invierno de la huerta cubiertos por manto blanco. Estas fechas suelen ser ajetreadas en las casas bercianas, tradición típica de esta época, muchos aprovechan esta semana, ya que es un puente en el que la familia se puede juntar para echar una mano, aunque sea a comer, jeje. María me cuenta que al fin y al cabo siempre es una buena excusa para volver a casa de mamá, comer sin conocimiento, reirse un rato y despotricar como todos los años de cómo tendría que haber sido y no fue... que si esa no es forma, que si corta por aquí, que si los cuchillos no están afilados, que si a esto le falta el plástico para no mojarse, que si le has echado mucho picante, que si faltan tripas... Con estas cosas ella se ríe muchísimo, dice _¡Qué sería de la matanza sin estas tertulias !_. La matanza en sí es matar un cerdo, (aquí le llaman gocho). Se mezcla la familia con vecinos y amigos, y no importa que el cerdo no sea tuyo, se ayuda todo el mundo. No falta el experto que va de casa en casa y despieza todos los "gochos" del vecindario, ni la que sabe atar chorizos y coser tripas para botillos como nadie, ni el que trae sus cuchillos y las agujas grandes , porque ..."ya sabía yo que harían falta".. Este año, como me han invitado, les voy a ayudar a colocar los adornos de Navidad en EL ALMENDRO DE MARÍA, porque lo que se dice ayudar en todo lo demás, a ver si a comer. Y después del trabajo... la comida, que de antemano, me cuentan que ya se sabe cuál será.... El día de matar, cocido. El día de picar, carne de cerdo a la brasa, queso a la plancha y pan con orujo y azúcar Y el día de embutir, por supuesto hay que probar el picadillo ( los chichos cómo llaman en El Bierzo) con patatas fritas y escarola. El repollo con refrito, queda para el día en que la carne se deja con el adobo para que coja sabor. ¡Lo que se dice dieta mediterránea, no es!. Y para coronar, comienza a rondar la bandeja de turrones, María dice que se empieza a montar en este puente y no desaparece hasta Enero. Está tan cerca La Navidad, y os echo tanto de menos. A pesar de todo quiero que sepas que estoy bien en Ponferrada, me gusta mucho. Mamá, estoy mirando por la ventana y el atardecer está regalando pinceladas de fuego en el cielo. ¡Ojalá pudieras verlo! Muchos besos para todos. TQ P.D: Prometo seguir escribiendo y contándote cosas.